SETAS MÁGICAS: PSILOCIBINA Y PSILOCINA
La psilocibina y la psilocina son compuestos químicos que se encuentran de manera natural en ciertas especies de setas. La psilocibina y la psilocina son las sustancias activas responsables del efecto psicoactivo de las setas alucinógenas o setas mágicas. Cuando tomas una seta mágica, estas sustancias interactuarán con los receptores en el cerebro. El efecto es diferente para todos, pero a menudo ocurren alucinaciones, y el uso de setas mágicas puede afectar tu estado de ánimo y tus pensamientos. Para la mayoría de los consumidores, la experiencia del viaje con las setas mágicas es fantástica y casi mágica. Algunas personas no soportan los efectos visuales o el cambio en la percepción de la realidad, provocándoles miedos. Esta sensación desagradable se denomina un mal viaje. No te preocupes, los efectos desaparecen al cabo de unas horas.
Los ingredientes de las Setas Mágicas y las Trufas Mágicas
Hacer un viaje psicodélico no es posible con cualquier seta aleatoria. Necesitas una seta del género Psilocybe cubensis para realizar un viaje psicodélico. Crecen en todo el mundo, preferiblemente en lugares cálidos y húmedos. La humanidad ha utilizado setas mágicas durante miles de años. Durante mucho tiempo no se sabía qué causó el efecto psicoactivo de las setas Psilocybe cubensis. Hoy en día sabemos que la psilocibina y la psilocina son los compuestos psicoactivos de las setas mágicas que causan los efectos psicodélicos. Estos dos ingredientes activos nos aseguran de que podamos viajar a otras dimensiones y descubrir lados desconocidos de nosotros mismos.
Por lo tanto, las setas Psilocybe cubensis contienen psilocibina y psilocina. Cada seta mágica, y también las diferentes especies entre sí, contienen diferentes cantidades de estas dos sustancias. La psilocibina y la psilocina son ambas sustancias psicoactivas, pero la psilocibina es la precursora de la psilocina. La psilocina es inestable y no solo se degrada cuando se seca la seta, pero también bajo la influencia del oxígeno, el calor y el tacto.
¿Qué sucede cuando ingieres Psilocibina?
La psilocibina es el principal componente psicoactivo de las setas y trufas mágicas, que actúa como precusor química de la psilocina. Las setas y trufas mágicas sólo contienen una pequeña cantidad de psilocina en comparación con la psilocibina. Ambas sustancias son triptaminas, responsables de los efectos psicodélicos. Cuando tomas setas o trufas mágicas, tu cuerpo empezará a descomponerlas, liberando la psilocibina y la psilocina. Al absorberse estas sustancias psicoactivas, la psilocina entra en la vía sanguínea y se dirige al cerebro. La composición química de la psilocina es muy similar a la de la serotonina. La serotonina es un neurotransmisor, en gran parte responsable de nuestro estado de ánimo. No por nada la serotonina es conocida como "la hormona de la felicidad". Debido a esta similitud, los receptores de serotonina en el cerebro "confunden" la psilocina con la serotonina. En el momento en que la psilocina se une a los receptores, el efecto mágico y psicodélico comienza a establecerse. Los primeros efectos psicoactivos se notarán aproximadamente una hora después de la ingestión.
Los efectos de la Psilocina en nuestro cuerpo y mente
Como se mencionó anteriormente, la psilocina se conectará con los receptores de serotonina en nuestro cerebro. El efecto se nota de varias formas, tanto físicamente como mentalmente. El viaje psicodélico está por comenzar. Los efectos que sentirás pueden estar relacionados con la ubicación de los diferentes receptores en el cerebro. Cuando se estimulan los receptores de la corteza cerebral (o córtex cerebral), sentirás una respuesta emocional. Por ejemplo, puedes sentirte eufórico o tranquilo y conectado con todas las personas que te rodean. Además, tus sentidos también se verán afectados. Los usuarios de setas o trufas mágicas indican que oyen, ven, saborean, huelen y se sienten más agudos. Puedes experimentar alucinaciones visuales, vividas y coloridas. También puedes experimentar una alteracíon en la percepción de la relación espacio-tiempo, una alteración en la percepción del sonido y percibir el mundo de una manera completamente nueva. A menudo tendrás pensamientos profundos y filosóficos sobre ti mismo o el mundo que te rodea.
En cierto punto, el efecto de la psilocina desaparece. La sustancia será reabsorbida por el cuerpo. Entonces, la psilocina será extraído y tu cuerpo tendrá que adaptarse a la nueva situación. A menudo se describe esta sensación como si estuvieras "descendiendo". Como si estuvieras regresando a la Tierra después de un viaje cosmonáutico.
Datos fascinantes sobre la Psilocibina
- Puedes encontrar setas alucinógenas o mágicas en todo el mundo. La más conocida y más consumida es la Psilocybe cubensis.
- En los Países Bajos también crece un hongo mágico: el Psilocybe semilanceata, también conocido como mongui u hongo de San Juan.
- El micelio crece bajo la tierra y es el conjunto o red de innumerables grupos de hifas que forman la parte vegetativa de las setas mágicas (Psilocybe cubensis). El micelio es imprescindible para el crecimiento de las setas mágicas. Las trufas mágicas (Esclerotia) podrían defenirse como una masa compacta de micelio endurecido. Para proteger los alimentos para el crecimiento de la seta, el micelio se endurece, almacenando los alimentos para los momentos en que hay muy poca alimentación disponible debido al calor, la sequedad o el frío. Las trufas mágicas también contienen (mucha) psilocibina.
- El uso de setas o trufas mágicas no es adictivo. Sin embargo, puedes desarrollar tolerancia a las sustancias psicoactivas. Puedes prevenir que tu organismo se habitúa a la psilocibina y psilocina por no tomar setas o trufas mágicas de una forma continuada y tomar un periodo de descanso cada vez que las hayas tomado.
- ¿Sabías que no solo puedes hacer viajes con las setas o trufas mágicas u otras sustancias psicodélicas? La psilocibina tiene propiedades beneficiosas para la salud si se toma en dosis muy pequeñas, las conocidas microdosis psicodélicas. La microdosificación consiste en tomar una dosis extremadamente pequeña de un psicodélico, en este caso de la seta Psilocybe cubensis. De esta manera podrás aprovechar las propiedades beneficiosas de la psilocibina para tu salud, sin notar ningún efecto psicoactivo. Las microdosis no provocan efectos psicodélicos, y, por lo tanto, no causan distorsiones perceptuales. Además, las microdosis psicodélicas no te colocan en absoluto.
- En el mundo existen casi 200 especies diferentes de setas y trufas mágicas.
- Varios estudios clínicos han demostrado el increíble potencial de la psilocibina como tratamiento para diversos trastornos psicológicos. Ensayos similares sugieren que pequeñas cantidades de psilocibina pueden promover el crecimiento de nuevas células cerebrales.