CÓMO LIMPIAR UN VAPORIZADOR
Si no has limpiado tu vaporizador antes de utilizarlo de nuevo, entonces puede ser que tu experiencia de fumar no sea tan placentera como el primer día. Ya sea que tengas un vaporizador para concentrados o hierbas secas, o un vaporizador tipo bolígrafo, debes limpiar estos dispositivos con regularidad. No solo podrás continuar disfrutando de un sabor y olor óptimo, sino que tu vaporizador también durará mucho más. En este blog puedes leer por qué deberías limpiar regularmente tu vaporizador y cómo hacerlo.
Razones para limpiar tu vaporizador
Usar un vaporizador tiene muchas ventajas. Un vaporizador es un dispositivo de extracción de sustancias activas (THC, CBD etc.) de materiales vegetales, como la marihuana, por ejemplo. En vez de quemar las hierbas, un vaporizador las calienta para evaporar sus sustancias activas. Se puede decir que un vaporizador es como una especie de horno pequeño. Durante la vaporización no se queman la hierbas, evitando las sustancias tóxicas de la combustión. Como no se produce humo, no inhalas sustancias tóxicas como la naftalina, el alquitrán etc. El vapor que inhalas, generado por el calentamiento de las hierbas, contiene mucho menos toxinas y radicales libres y es mucho menos dañina para la salud que cuando se fuman estas hierbas. El uso de un vaporizador no solo ofrece una experiencia más saludable, sino también una experiencia más puro e intenso. Pero a pesar de que no se libera humo al vapear, esto no significa que el dispositivo en sí no se ensucie. Con el tiempo, se van acumulando los residuos pegajosos dentro del dispositivo, al igual que cuando fumas con un bong o pipa. Si no lo eliminas, podría causar problemas. A continuación, te contamos 3 razones por las que deberías limpiar regularmente tu vaporizador.
1. Tu dispositivo durará más
Debido a la evaporación del material vegetal, se acumulará una mezcla pegajosa de resina y otras sustancias (materiales vegetales) en el interior del vaporizador. Como resultado, las diversas partes del dispositivo no podrán funcionar correctamente. Si realmente nunca limpias tu vaporizador, incluso puede provocar daños a largo plazo. Al limpiar el vaporizador con regularidad, podrás prolongar la vida útil de tu vaporizador.
2. Mantén tu salud: un vapor más saludable
También es recomendable limpiar tu vaporizador regularmente por tu propia salud. Si hay suciedad acumulada en el interior de tu vaporizador, este sería un caldo de cultivo ideal para bacterias y hongos dañinos. Estos podrían terminar en tu cuerpo a través del vapeo. Puedes imaginar que esto no es bueno para tu salud.
3. Mantenimiento para el buen funcionamiento
Si usas tu vaporizador durante mucho tiempo sin limpiarlo de vez en cuando, todo tipo de material vegetal pegajoso y resina pegajosa se adherirá al interior del dispositivo. Como resultado, es posible que piezas de tu vaporizador, como los ventiladores y la cámara de calentamiento, por ejemplo, no funcionen tan bien. Eso puede tener una influencia negativa en el efecto y, por lo tanto, también en el sabor del material vegetal que estás vapeando.
Cómo limpiar un vaporizador
Puedes limpiar rápidamente tu vaporizador cada vez que vapees. Debes hacer una limpieza a fondo cada dos semanas. A continuación puedes leer cómo limpiar un vaporizador para material vegetal seco, un vaporizador para concentrados y cómo limpiar un vaporizador pluma (vaporizador tipo bolígrafo). Para todos los vaporizadores, primero debes leer atentamente el manual de usuario, para saber de qué partes consta el dispositivo y cómo desmontarlo y volver a montarlo.
Limpieza de un vaporizador para material vegetal seco
Desmonta el vaporizador para limpiarlo. Agita y golpea las distintas partes, como la boquilla y la cámara de calentamiento, para eliminar los restos de material vegetal. Usa un cepillo pequeño o un limpiapipas para cepillar bien cada parte. Asegúrate de que la cámara de la hierba y la boquilla estén bien limpias. Puedes usar alcohol isopropílico para eliminar el material vegetal y residuos pegajosos, ya que ayudará a ablandarlos mejor para que puedas eliminarlos con más facilidad.
En caso de suciedad muy pegajosa, puedes colocar las piezas en un recipiente con alcohol, donde pueden remojarse durante media hora. Esto se recomienda especialmente para rejillas/mallas de metal que están muy sucias. Después de un baño así, brillarán como nuevo. Cuando todo esté limpio y seco, vuelve a montar el vaporizador y limpia el exterior con un paño.
Limpieza de un vaporizador tipo bolígrafo o vaporizador pluma
Un vaporizador pluma también deberá limpiarse con regularidad. Deberías haber recibido un cepillo de limpieza con tu vaporizador pluma, de lo contrario, también puedes usar un limpiapipas. Golpea primero el vaporizador pluma para aflojar un poco la suciedad. Asegúrate de que las piezas pequeñas no se caigan. Abre el vaporizador y limpia su interior con el cepillo (o limpiapipas). Si la cámara de calentamiento se puede desmontar, hazlo. Entonces también puedes limpiarla.
Puedes usar un bastoncillo de algodón para la limpieza de la bobina. Sumérjalo en alcohol y elimina cualquier material vegetal que se haya adherido a la bobina. Ahora toma el lado seco del bastoncillo de algodón para secar la bobina. Como último paso de la limpieza de tu vaporizador, retira la rejilla/malla de metal y colócala en un baño de alcohol durante media hora. Enjuágala bien bajo el grifo, déjala secar y podrás volver a montar tu vaporizador pluma.
Limpieza de un vaporizador para concentrados
Los concentrados generan depósitos muy pegajosos. Por lo tanto, la limpieza regular de tu vaporizador para concentrados es muy importante. La forma más fácil de hacerlo es con alcohol y un bastoncillo de algodón. Desmonta el dispositivo. Sumerja el bastoncillo de algodón en un poco de alcohol. Limpia la cámara de calentamiento con el bastoncillo de algodón. Ten cuidado, el elemento calefactor es frágil y puede romperse si aplicas demasiada fuerza. Limpia también la boquilla, la rejilla/malla (si está presente) y otras partes de esta manera. Si hay suciedad persistente, puedes remojar las piezas en alcohol durante un tiempo. Retira también la batería y límpiala. Una vez que las piezas estén limpias y secas, puedes volver a montar tu vaporizador.
La limpieza de tu vaporizador garantiza que pueda volver a funcionar de manera óptima. Si quieres disfrutar del rico sabor y aroma del cannabis u otras hierbas, ¡entonces limpiar regularmente tu dispositivo es muy importante!